Los avances en fertilización asistida no se detienen a 37 años del nacimiento de la primera bebé de probeta 0
El 25 de julio de 1978 vino al mundo Louise Brown, la primera bebé de probeta, hoy ya madre, y el descubrimiento revolucionó la ciencia y más aún, el área de reproducción asistida. Desde entonces, los avances científicos en este campo no han dejado de sucederse y, con los cambios sociales de los últimos años, todavía más.
En medio de controversias y debates, la primera bebé de probeta vio la luz revolucionando el mundo científico, dando lugar al nacimiento de más de 4 millones de niños en el mundo y también sentando las bases para grandes cambios sociales que, desde entonces, no han dejado de sucederse: la atención se centró en fomentar los nacimientos en lugar de controlarlos (anteriormente, la revolución pasaba por el control de la natalidad, a partir del nacimiento de la píldora anticonceptiva), por ejemplo, y hoy día se focaliza en la necesidad de regulaciones y leyes que otorguen un marco adecuado al uso de las técnicas de fertilización asistida sin coartar posibilidades a las personas que buscan un hijo.
Otro elemento de cambio, es cada vez más personas en soledad, enfrentan la posibilidad de ser padres, crecen las familias monoparentales y la fertilización in Vitro también les brinda una posibilidad. E, incluso, en nuestro país –como en tantos otros-, socialmente se avanzó desde la unión civil hasta el matrimonio igualitario de personas del mismo sexo y las técnicas de reproducción asistida debieron adaptarse también a ellos. En este contexto es que uno de los avances más revolucionarios –y también más polémicos- de los últimos tiempos les brinda a las parejas del mismo sexo otra posibilidad: la gestación por sustitución o subrogación de vientre. Indicado principalmente para una mujer con infertilidad cuando presenta algún problema en su útero o porque su salud está afectada y corre un riesgo de vida en caso de embarazo, esta técnica se convirtió también en una posibilidad certera para un hombre solo o para una pareja homosexual masculina.
La subrogación de útero se trata de una manifestación de voluntades donde una mujer lleva adelante un embarazo para otra persona o pareja.
Legalmente hablando
Hay que crear conciencia de que la gestación por sustitución o maternidad subrogada no está prohibida como muchos afirman, no hay una normativa que la permita o la prohíba, por lo cual, es posible realizarla.
En nuestro país, si bien esta técnica fue dejada fuera de la última reforma aprobada del Código Civil que entra en vigencia el próximo mes de agosto, aunque no está regulada, no está prohibida. Sin embargo, como para la ley en principio madre es la mujer que da a luz pero admite prueba en contrario, mediante un ADN sumado a la voluntad procreacional de quienes quieren y luego son, los padres del niño que nace por esta técnica es posible desvirtuarlo. Esto ocurrió en el primer fallo de este tipo en nuestro país, en 2013, que indicó que la niña nacida por esta técnica fuera inscripta como hija de sus padres procreacionales y no de la mujer que la dio a luz. Próximamente, la justicia argentina inscribirá por segunda vez en la historia a una niña gestada en un vientre “prestado” como hija de sus padres procreacionales, fallo resuelto por el juez Gustavo Eduardo Noya del Juzgado Civil 83 y que se sostiene en los principios de interés superior del niño, de Derecho a la Identidad, y a la protección de las relaciones familiares y la consolidación de la familia. Lo que siempre prevalece es el interés superior del niño, su verdad de quienes quisieron ser padres. Hoy por hoy al menos uno de los padres debe aportar su gameto para estas prácticas. Nada cambia si, como suele suceder, hay una ovodonación. Todavía no hay casos judiciales en Argentina donde exista una gestación por sustitución sumada a donación de embrión en el caso que ninguno de los padres pueda aportar su gameto. Pero nadie sabe qué nos depara el futuro, solo que las técnicas de fertilización asistida han venido para quedarse y crecer para poder dar respuesta cada vez a más personas que deseen cumplir el sueño de tener un hijo.